
Cómo practicar 'running' si es tu primera vez
Antes de calzarte las deportivas, echa un vistazo a estos trucos que te ayudarán a realizar esta actividad de forma segura. ¡No te lo pierdas! ¡A correr!
Después de las vacaciones, retomamos la actividad física en el exterior y el cuerpo comienza a acostumbrarse nuevamente a la exigencia. Recuperamos algo de resistencia y no nos cansamos tanto. “Entrenar fuera puede estar bien para recuperar estabilidad en nuestro cuerpo, pero debemos considerar que, si no somos profesionales, hacerlo sin una guía puede ser contraproducente, por la sobrecarga o sobre exigencia que podemos llegar a marcarnos”, comenta Javier Cobas, entrenador personal de Metropolitan Eurobuilding.
Según nos explican los expertos de Metropolitan, el running es la actividad por excelencia para hacer en el exterior. Sean aficionados o profesionales, la mayoría de la gente ha encontrado en esta actividad o bien un nuevo placer o una vía de escape. Lo cierto es que se está practicando y mucho. Con una sesión de 30 o 40 minutos diarios será más que suficiente. Si todavía no tienes tanta resistencia, pero quieres correr, lo que puedes hacer es probar el método CACO. Como su nombre indica, combina Caminar con Correr. Es un recurso ideal para ir ganando ritmo si nos queremos iniciar en el mundo del running. Alternar caminatas con momentos de mayor velocidad ayudará a que el cuerpo, músculos y articulaciones vayan adaptándose progresivamente a la práctica, evitando lesiones, por ejemplo. Dependiendo del nivel y la experiencia que tuviéramos antes podemos comenzar desde 4 minutos andando y 2 minutos corriendo, hasta terminar haciendo en una progresión de dos semanas un minuto andando y cuatro minutos corriendo. Sesión tras sesión, vamos restando minutos andando para sumárselos a correr. Además de ir incrementando el ritmo poco a poco, también descansa. No quieras recuperar los meses de descanso en dos semanas, porque no solo no lo lograrás, sino que hasta te podrás lesionar y la vuelta a la rutina será mucho más lenta.
Si quieres salir a correr ya mismo y a hacer ejercicio al aire libre, y esta es la primera vez que te pones en serio con esta actividad (o si vas a retomarla después de mucho tiempo), antes de salir de casa, siéntate cómoda y toma nota de estos consejos para que todo te resulte mucho más fácil.

No estropees el primer día pegándote la paliza de tu vida. Tu primera vez debería ser una toma de contacto. ¡No te pases!

Empieza con calma. Anda unos minutos y ponte a correr. Descansa andando y vuelve a correr... Y así en bucle.

Si vas a empezar con esta actividad, lo ideal sería entrenar tres días a la semana.

Una actividad complementaria que te puede ayudar es el pilates, ya que mejora la flexibilidad.

Estira el cuerpo bien antes de empezar a correr. Y una vez acabado el entrenamiento, vuelve a estirar todos los músculos trabajados.

Cuando salgas a correr, intenta respirar de manera natural y olvídate de estereotipos como inspirar siempre por la nariz y expirar por la boca, etc.

No te olvides de que el cuerpo necesita unos periodos de descanso para afrontar el siguiente entrenamiento en condiciones.

Para no abandonar la actividad antes de tiempo, es imprescindible marcarse un objetivo.

Si entrenas por la tarde, lo ideal sería realizar una comida rica en hidratos de carbono para un extra de energía.

Lo más importante es elegir unas buenas zapatillas.